El Barça cierra la pretemporada con una derrota tan inesperada como dura (0-3) contra el Mónaco en un gris Trofeo Joan Gamper.

La pretemporada del Barça de Flick ya es historia. Después de tres partidos ilusionantes en la gira, el Gamper defraudó y el Barça no pudo generar ilusión ante su afición con un partido muy discreto ante un eficaz Mónaco que ganó merecidamente en Montjuïc.

Hansi Flick planteó una alineación atractiva plagada de jóvenes que han deslumbrado en la pretemporada. El Barça arrancó con fuerza en un primer minuto en el que Raphina desequilibró y Pau Víctor perdonó un gol que parecía seguro. No entró y al Barça le costó un mundo volver a generar situaciones de gol tan claras.

El Mónaco, poco a poco, con mucha presencia física fue neutralizando el ímpetu inicial de los blaugranas y el partido se volvió espeso. Lewandowski lo probó con un remate lejano pero al Barça le faltaba creatividad y chispa.

Primer tiempo 

El dominio del balón no iba acompañado de la electricidad mostrada en los anteriores encuentros. Alejandro Balde rompía la monotonía con una jugada típica del lateral zurdo pero más allá de arranques individuales al juego le faltaba ritmo y continuidad.

El Barça necesita la mejor versión del avión de La Masia y poco a poco Balde va camino de encontrarla. El público intentó animar el discreto espectáculo con la ola porque el juego era demasiado previsible y poco brillante.

Errores que se pagan

La segunda parte empezó con un error de coordinación entre Iñigo y Bernal en la salida de balón que aprovechó Camara, muy listo, para anotar el 0-1.

El gol no despertó del letargo a un Barça que necesitaba reaccionar pero encajó el 0-2 muy rápido en una gran combinación del subcampeón francés. Pérdida de balón de Gundo que castigaba con una gran definición de Embolo que arrancó los primeros pitos de la afición que no esperaba este mazazo. Gündogan se lesionó en una jugada desgraciada y fue uno de los cuatro sustituidos por Flick.

Más decepciones

La entrada de Lamine animó a la afición y revitalizó al equipo. A los pocos instantes se inventó un pase genial que Pau Víctor estuvo muy cerca de convertir en gol. El de Rocafonda se animó a probar el chut pero el Mónaco resistía.

El Barça le ponía ganas pero el Mónaco fue letal. Los visitantes volvieron a castigar al Barça con otro gran gol de Mawisa .

La efectividad del Mónaco coincidió con la impotencia del Barça que fue incapaz de generar buen juego y ocasiones. Solo el juvenil Quim Junyent estuvo cerca de recortar diferencias.

La afición se fue muy triste a casa con la imagen de un equipo que no respondió a las expectativas. Hubo pitos pero la mayoría de los aficionados regresaros callados y disgustados por lo que vieron a pocos días de que el Barça se estrene en La Liga.

El Barça no perdía en su trofeo de verano desde hace más de una década cuando la Sampdoria venció 0-1 al Barça de Tito Vilanova en el verano del 2012.