La Italia de Roberto Mancini logra conseguir su segunda UEFA Eurocopa, tras la de 1968; Italia ganó en penales ante una bien equiparada Inglaterra que fue de más a menos en el compromiso.
La estrategia de Inglaterra no funcionó y, a pesar de adelantarse tempraneramente en el marcador (Luke Shaw 22´), no supieron defender el resultado. Wembley era, sin duda alguna, el escenario perfecto, para que los creadores del deporte rey pudieran conseguir un título importante a nivel de selecciones mayores tras 55 años de angustiosa sequía (el último título que habían conseguido fue el del Mundial de 1966, precisamente celebrado en su propio país).
Luke Shaw es el segundo jugador del Manchester United que marca en una final de Eurocopa o Copa del Mundo. El primero fue Paul Pogba en Rusia 2018.
Italia, por su parte, arrancó mal el compromiso, de hecho, fue una primera mitad para el olvido, se fueron al entretiempo con un gol encima. Sin embargo, en la charla del medio tiempo lograron ajustar detalles, saliendo mejor armados en la segunda parte. Los de Roberto Mancini empatarían el juego al 67´a través de Leonardo Bonucci.
Bonucci es el tercer defensa que marca en una final de Eurocopa, tras Alba (2012) y Shaw (2021). Sólo otro defensa italiano había marcado en una final: Materazzi (contra Francia en el Mundial 2006).
Ese empate de los 90 reglamentarios nos enviarían eventualmente a la prórroga. En el extra-tiempo ninguna de las 2 selecciones pudo hacerse daño y el historiador dictaría el renglón final en los penales.
En el fusilamiento, las anotaciones de Federicho Bernardeschi, Leonardo Bonucci y Domenico Berardi, además de las fallas inglesas de Bukayo Saka, Jadon Sancho y Marcus Rashford, terminarían dando el título a la "azzurra", en una increíble participación del guardameta italiano Gianluigi Donnarumma.
¡ITALIA CAMPEÓN DE EUROPA!