Victoria de prestigio del Barcelona en París para meter medio pie en las semifinales de Champions.
Nadie contaba con el Barça, pero los de Xavi tienen cerca las semifinales de la Champions después de hacer un partidazo en el Parque de los Príncipes. No está todo dicho, y menos con Mbappé de enemigo, pero han dado un gran paso para meterse entre los cuatro mejores de Europa. El Barça hizo una primera parte impecable que acabó 0-1 gracias a un gol de Raphinha, pero en el inicio de la segunda parte el PSG remontó en tres minutos con goles de Dembélé y Vitinha. Xavi acertó con los cambios cuando el equipo más sufría y Raphinha y Christensen le dieron la vuelta al marcador para el 2-3 final. La defensa azulgrana frenó muy bien a Mbappé y Montjuïc decidirá en siete días.
El Barça necesitaba un partido como éste. Para su autoestima más que nada. Han sido varios años viendo desde casa las rondas finales europeas y volver a estar entre los ocho mejores de la Champions es un subidón para un club no acostumbrado a estar en segundo plano. El duelo, además, derrochaba morbo por todos los lados: Luis Enrique contra Xavi en los banquillos y en el bando parisino un ex como Dembélé, el exmadridista Asensio y Mbappé, que se va a aburrir a jugar Clásicos a partir de la próxima temporada.
En el once de Xavi Hernández destacó la vuelta de De Jong tras su lesión. Koundé y Cancelo fueron los agraciados con el marrón de la noche al tener que frenar las internadas por banda de Mbappé y Dembélé, los dos grandes peligros del cuadro francés. El arranque del partido fue para los parisinos, se hicieron con el balón y dispusieron de varios córners a su favor pero la primeras ocasiones - y claras- las tuvieron Lewandowski al cabecear un córner que sacó sobre la línea Nuno Mendes y Cancelo con un disparo raso que despejó Donnarumma a córner. Muy buena puesta de escena de los de Xavi en la primera media hora de juego.
Las ayudas de Araujo a Koundé maniataban a Mbappé, mientras que Cancelo se bastaba él solo para frenar a Dembélé. El primer remate local fue de Kang-In Lee a los 28 minutos, dato que reflejaba la seriedad de los catalanes en defensa. El Barça se sentía cómodo sobre el campo y en el último cuarto de hora de la primera parte se fue al ataque aprovechando las buenas acciones de Lewandowski jugando de espaldas y abriendo espacios a Raphinha y Lamine Yamal. Y así llegó una jugada clave del partido en el minuto 37. Balón de Cubarsí para Lewandowski, carrera rápida del polaco que abre a banda sobre Lamine Yamal para que éste haga un centro envenenado con el exterior al que no llega bien Donnarumma y Raphinha aproveche el rechace para marcar el 0-1.
El gol aceleró el partido de una manera clara. El PSG acusó el golpe y se fue de forma algo alocada hacia la meta de Ter Stegen, pero ese ataque a lo loco permitió contras a los de Xavi que tuvieron dos opciones para el 0-2 pero ni Cancelo ni Lamine Yamal estuvieron acertados a la hora de pasar a compañeros en buena posición. El 0-1 hacía justicia a lo visto tras el descanso. Todo eran buenas noticias para el Barça salvo la amarilla que vio Sergi Roberto que le hará perderse el partido de vuelta.
Luis Enrique quitó en el descanso a Marco Asensio y sacó a Barcola. El asturiano buscaba más velocidad, quería recursos ofensivos diferentes a los aportados por el balear. Y la jugada no le pudo salir mejor porque a los cinco minutos de la reanudación el PSG ganaba 2-1. Primero con un golazo de Dembélé por toda la escuadra tras jugada previa de Mbappé y sólo dos después fue Vitinha quien daba la vuelta al marcador con un tiro cruzado tras un buen pase de Fabián Ruiz. Todo el buen trabajo se los azulgranas en el primer tiempo se vino abajo en cinco minutos. Y pudo ser peor porque Ter Stegen desvió al larguero un remate de Barcola en el 54.
Xavi acierta con los cambios
Xavi intentó capear el temporal parisino dando entrada a Pedri y Joao Félix. Y el de Terrassa, al igual que Luis Enrique, acertó de pleno porque el primer balón que tocó Pedri se transformó en una asistencia perfecta para que Raphinha de primeras llevara el empate al marcador. Y algo mejor aún: recuperó la posesión del balón. El PSG no se esperaba este mazazo cuando mejor estaba. El empate no parecía contentar a nadie y las ocasiones se sucedían en ambas porterías. Araujo evitó una llegada en solitario de Barcola; Donnarumma detuvo una falta peligrosa de Raphinha; Dembélé se topó con el poste, Nuno Mendes cortó un balón que dejaba solo a Ferran Torres... y a la quinta fue la vencida. Córner que saca Gündogan y Christensen, que acababa de salir, cabecea desde cerca ante un Donnarumma que no se atrevió a salir. No se movió más el marcador y todo se pone a favor de los azulgranas para estar en semifinales. Montjuïc decidirá.